lunes, 30 de julio de 2012


Los ojos delatan que te tiembla el corazón, que estás en el fondo, que no puedes. Que alguien ha abierto la herida otra vez, que el dolor va calando más hondo poco a poco. Que te han marchitado la ilusión. Pero no has de tener miedo, que yo estoy aquí si quieres. Puedo pasar las noches en vela si no duermes, puedo intentar asustar a todas tus pesadillas, decir unas cuantas tonterías si con eso ríes de nuevo. Y si no, puedo cantarte al oído una canción.